(Lee la entrega anterior) |
López hizo otra pausa, dejando en el aire lo que acababa de decir, como para que empapara las mentes de sus consejeros.
—Sin embargo no somos unos desalmados… Basáñez, tome nota, por favor. Hable con el chico y ofrézcale un puesto en una de nuestras empresas. Si acepta nuestro ofrecimiento me temo que tendrá que elegir entre seguir estudiando o continuar jugando al fútbol. Aconséjele convenientemente. Pero hágale saber que su relación laboral con el Rayo habrá terminado, y en la nueva relación laboral que emprenda con nosotros no será invocable su pasado futbolÃstico. A partir de ese momento deberá atenerse a lo que sus jefes le pidan. Y estará a prueba por espacio de tres meses. Si no sabe cumplir como trabajador le esperará el destino que aguarda a quienes no saben amoldarse a las exigencias de un puesto laboral. No podremos hacer más por él. Sin embargo, hágale un seguimiento periódico, y vea si cuando acabe su licenciatura sus conocimientos pueden sernos de utilidad en L&A o sus capacidades nos permiten recomendarle.
- Escrito por Mirliton, publicado a las 11:52 h.
- Protagonistas: (ver la primera entrega)